Plan Estratégico ECMIA: 2010 - 2022
El presente plan ha sido elaborado como una herramienta de gestión que guiará nuestras acciones
I. Introducción
El presente Plan Estratégico 2012 - 2022 ha sido elaborado como una herramienta de gestión que guiará nuestras acciones, toma de decisiones y políticas como mujeres indígenas integrantes de organizaciones que conformamos el Enlace Continental de Mujeres Indígenas de las Américas – ECMIA; para el logro pleno de nuestros derechos humanos, individuales y colectivos como mujeres, jóvenes y pueblos indígenas.
Nuestro principal objetivo con el Plan Estratégico es de constituirnos como una red continental capaz de incidir en políticas regionales e internacionales para lograr la igualdad de derechos y oportunidades para todas las mujeres indígenas del continente incluyendo las jóvenes, de modo que disfruten de una vida plena y armónica, basados en los derechos económicos, sociales, políticos y culturales.
Sección 1: El ECMIA
1.1. Identidad y composición del ECMIA
Somos una articulación de organizaciones de mujeres indígenas y mixtas que generamos acciones para el fortalecimiento de capacidades, liderazgo y empoderamiento de mujeres y jóvenes indígenas. Asimismo como un espacio unificador de criterios, iniciativas y propuestas. Incidimos a nivel nacional e internacional en la generación de políticas y programas que garanticen el reconocimiento y ejercicio pleno de nuestros derechos humanos, como mujeres y pueblos indígenas, individuales y colectivos.
El ECMIA entiende los derechos de las mujeres indígenas como parte sustancial de las luchas por los territorios, recursos naturales, identidad, cosmovisión indígena y demás derechos de nuestros pueblos y organizaciones. Los derechos de las mujeres indígenas se entienden tanto como parte de los derechos colectivos, como de derechos individuales, indivisibles e irrenunciables .
El ECMIA es representativa, cuyos liderazgos son elegidos de manera democrática y transparente, en todos los países del Continente Americano. Está integrado por más de 20 organizaciones de Argentina, Belice, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Guayana, Guyana Francesa, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay, Venezuela y Estados Unidos.
1.2. Fines del ECMIA
Como ECMIA esperamos lograr el pleno reconocimiento y respeto nuestros derechos como mujeres, jóvenes y pueblos indígenas, particularmente aquellos vinculados a la defensa de nuestra identidad, territorio, integridad, libre determinación; el reconocimiento y respeto de nuestras autoridades, instituciones y organizaciones locales, regionales e internacionales y la participación igualitaria de las mujeres indígenas en todos los ámbitos de decisión y en los procesos sociales, económicos, políticos y culturales que se dan dentro de nuestros pueblos, países y regiones.
Para ello el ECMIA busca fortalecer la unidad de los pueblos, las mujeres y jóvenes indígenas del continente, incidir en las políticas públicas, y promover el cumplimiento de las leyes, Convenios, declaraciones y Tratados internacionales que reconocen nuestros derechos.
1.3. Estructura del ECMIA
El ECMIA articula organizaciones de mujeres indígenas y mujeres integrantes de organizaciones de pueblos indígenas de los países de las Américas. Tiene una estructura básica compuesta por 4 regiones, denominados ECMIAs Regionales: Norte, México, Centro y Sur. Cada ECMIA Regional, a su vez, está integrado por organizaciones de mujeres indígenas y mixtas de países ubicados en las respectivas regiones.
El máximo órgano de decisión del ECMIA es la Asamblea Continental, integrada por las representantes de todas las organizaciones integrantes, cuyas sesiones se realizan en el marco de los Encuentros Continentales cada tres años. La responsabilidad en la conducción de la organización recae en el Consejo Colegiado, el mismo que está conformado por la Coordinadora Continental y las Coordinadoras de cada ECMIA Regional.
La Coordinadora Continental asume la representación general del ECMIA y tiene la responsabilidad de ejecutar los acuerdos de la Asamblea. La gestión del Consejo Colegiado comprende la responsabilidad de liderar la ejecución y seguimiento de los Planes Estratégicos y Trienal, y su período abarca tres años.
La Coordinación Continental cuenta con una Secretaría Técnica que se encarga de la implementación técnica y operativa de las acciones, asimismo de implementar el sistema de comunicación entre las regionales y sus organizaciones integrantes.
Sección 2. Principios y Valores Estratégicos e Institucionales
Son principios del ECMIA:
- a. El respeto mutuo, la solidaridad, la ética y el compromiso de trabajar por el respeto de los derechos de los pueblos y las mujeres indígenas.
- b. La unidad e integración de esfuerzos entre organizaciones de mujeres indígenas y mixtas para constituirnos en sujetos/as de derechos plenos en todo ámbito.
- c. El respeto a los derechos de autonomía y libre determinación de los pueblos y mujeres indígenas, en el marco de los derechos individuales y colectivos.
- d. La coexistencia armoniosa en igualdad de oportunidades y condiciones entre nuestros pueblos y mujeres indígenas, conservando las relaciones intergeneracionales que incluyen a hombres, mujeres, niños, niñas, jóvenes y personas mayores, implican una relación de respeto y transmisión de conocimiento.
Las mujeres mayores y sabias, y mujeres jóvenes intercambian experiencias y conocimientos, basados en el respeto mutuo y en el fomento de nuevos liderazgos de mujeres jóvenes como una estrategia de pervivencia cultural y de empoderamiento de las nuevas generaciones.
Los valores que promueve el ECMIA y que guían todas sus acciones, iniciativas, relaciones y propuestas, están contenidas y expresadas en la cosmovisión indígena, la identidad y derechos de las mujeres y los pueblos indígenas, y el diálogo entre saberes y culturas diversas en un clima de respeto y transparencia.
Sección 3: Análisis de las principales tendencias y desafíos derivados del contexto
3.1. Procesos y tendencias
Los principales procesos que están relacionados con la vida de las comunidades y pueblos indígenas, y con las mujeres indígenas en particular, están referidos a:
3.1.1 Pobreza, desigualdad y situación de los pueblos indígenas
América es, según el último Informe de Desarrollo Humano del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el continente con mayor desigualdad entre su población, y más aún con la población indígena. Existen diferencias notables entre regiones y al interior de cada uno de los países. Las diferencias se relacionan también con los ámbitos urbano y rural.
Aunque no existen cifras precisas, los grupos de población en mayor situación de pobreza económica, con más necesidades insatisfechas y con menores oportunidades de desarrollo se encuentran en las poblaciones rurales. Son los pueblos indígenas y dentro de ello las mujeres, los niños y niñas indígenas los que presentan mayores índices de pobreza económica. En el otro extremo, las personas con mayores fortunas están en América. Las brechas entre pobres y ricos se han acrecentado.
En el Norte, en Estados Unidos la crisis financiera y la recesión ha incrementado la pobreza, pues los subsidios para la producción rural se han reducido. Es probable que esta situación se mantenga en el corto y mediano plazo, con una mejora al término de los próximos 10 años.
Canadá no está muy afectado por la crisis económica. La población indígena vive en forma diferente al resto de la población. La población indígena no quiere salir de la reserva, por lo tanto hay mayor presión demográfica y deterioro de los servicios, incrementándose la pobreza.
En el Sur la presencia de empresas extractivas transnacionales sigue en incremento. Las economías de los Estados del Sur han crecido sostenidamente, en cifras macroeconómicas, pero no en índices de desarrollo visibles para los movimientos indígenas; dependiendo de la inversión extranjera y de los países industrializados, de tal modo que la crisis financiera mundial y la contracción de algunos mercados ha generado un proceso de incertidumbre que se extenderá por varios años. La implementación de políticas de los Estados que priorizan las actividades extractivas está en aumento, perjudicando la vida y territorios de los pueblos indígenas.
En toda la región predomina el modelo de economía de mercado a la vez que los gobiernos implementan políticas de “reducción” de la pobreza mediante programas asistenciales que no son sostenibles y generan mayor dependencia y desmovilización de los grupos en situación de pobreza.
La llamada “crisis de alimentos” encierra una paradoja: un aumento en la productividad y producción de alimentos con la destrucción de volúmenes de producción para evitar la caída de precios en los mercados y, a la vez, pagando precios bajos a los productores rurales de pequeña escala por sus productos.
Un fenómeno que incide en la pobreza es el cambio climático, el cual está afectando más a las familias y comunidades rurales que dependen de la pequeña agricultura para subsistir, y tiene efectos negativos sobre los recursos naturales en territorios donde están asentados los pueblos indígenas.
3.1.2 Industrias extractivas, mega proyectos, modelo agro exportador y amenazas a los territorios de los pueblos indígenas
La mayor fuente de ingresos de los gobiernos en las Américas, sobre todo en el Sur, proviene de la extracción y exportación de minerales, así como de la explotación intensiva de los recursos naturales y uso de energía no renovable como el petróleo. En función de este modelo extractivo exportador, la tierra y territorios de los pueblos indígenas se ha mercantilizado, desarrollándose “incentivos” para la venta de tierras.
El impacto generado por la presencia de las industrias extractivas es la pérdida de recursos naturales, desplazamientos forzados y migración del campo a la ciudad, con El consiguiente aumento del proceso de urbanización y mayor demanda por infraestructura y servicios.
En el caso nosotras las mujeres indígenas, se incrementa la carga de trabajo ante la pérdida de territorio y reducción de acceso a recursos como el agua. La absorción de mano de obra masculina y la migración estacional de los hombres en la búsqueda de empleo sigue incrementando los hogares con jefatura femenina, recargado aún más las responsabilidades de las mujeres. Los hogares con jefaturas femeninas han sido siempre parte de la historia de los pueblos indígenas y representa una entre la gran variedad de tipos de familias que existen en las sociedades. Pero ante la pérdida de recursos naturales, las mujeres se enfrentan a situaciones límites de trabajo y de subsistencia.
De otro lado, se ha incrementado las plantaciones dedicadas a la producción de agro combustibles (maíz y caña de azúcar) en detrimento de la producción de alimentos para el consumo y contribuyendo a la crisis de alimentos, que ya está mostrando sus efectos negativos en diversos países del continente.
Como parte de las grandes inversiones en el continente, se vienen ejecutando grandes proyectos de infraestructura que atentan contra la biodiversidad, los bosques, el agua e incrementan de los impactos del cambio climático. Frente a este fenómeno, el conocimiento ancestral en el cuidado de los recursos naturales y particularmente los aportes de las mujeres indígenas no se están tomando en cuenta; sin embargo representan una alternativa para enfrentar los impactos del cambio climático.
3.1.3 Violencia de género, situación de las mujeres indígenas y su acceso a justicia
La violencia contra las mujeres indígenas es histórica, estructural y sistémica, y se explica en los siguientes factores. En primer lugar existe un modelo económico que promueve las industrias extractivas que se ubican en nuestros territorios, causando contaminación ambiental, depredación de recursos naturales para la sobrevivencia, causando fuertes conflictos sociales donde el Estado responde de manera represiva, militarizando nuestros territorios, imponiendo restricciones a nuestras libertades, muchas veces matando y violando a las mujeres de las comunidades.
Además, de la violencia de Estado, históricamente las mujeres indígenas hemos sido un sector excluido, discriminado, nuestras voces y formas de organización y sistemas de justicia ancestral no son respetados a cabalidad por agentes del Estado, tampoco somos consideradas sujetas de derechos cuando somos explotadas laboralmente o sexualmente. Es un hecho comprobado que a causa de la latente violencia y despojo de nuestros recursos, las mujeres estamos migrando de nuestras comunidades, y somos más vulnerables a las redes de trata laboral y sexual. Esta violencia sistemática a mediano plazo amenaza nuestras vidas, como personas y a nuestras culturas y pueblos.
Otro factor a considerar es la violencia que vivimos las mujeres desde nuestros mismos pueblos, a considerarse nuestro rol como inferior o invisibilizado en la contribución a las economías domésticas y locales. Además, existen tradiciones culturales que atentan contra nuestra integridad física y psicológica, como puede ser el casamiento de niñas y la extirpación del clítoris, u otras. Igualmente está la legitimidad de la que gozan los esposos y convivientes para golpear a sus parejas, sin ningún tipo de reparo, consideración o justicia.
En este contexto es que las mujeres indígenas presencian la llegada de grupos evangelizadores, ya no católicos, como en la época de conquista y represión colonial, sino en variantes del cristianismo, cuyo mensaje principal es la extirpación de las creencias culturales sobre la naturaleza y el ser humano, por la imposición de un dios occidental y represor. Estos grupos también consideran que los roles de género deben ser mucho más estrictos, dejando fuera de la esfera pública de participación y representación a las mujeres, sólo admitiéndolas como entes reproductores de vida, en dependencia de sus esposos y/o padres.
Lamentablemente todos estos factores que posibilitan la violencia hacia las mujeres y niñas indígenas, se está viendo agudizada por las siguientes tendencias globales: falta de alimento causado por la legalidad de las patentes de semillas, la penetración de transgénicos a nuestros territorios, el racismo y discriminación, la institucionalización de un sistema de justicia ajeno a nuestro sistema de justicia ancestral, que impone normas y procedimientos ajenos a la realidad de las comunidades y pueblos indígenas; los conflictos armados cerca o en territorios indígenas, entre otros.
3.1.4 Instrumentos internacionales y estado de ratificación de los gobiernos del continente.
Los Instrumentos internacionales relativos a derechos de los pueblos, mujeres indígenas y equidad de género son una herramienta fundamental para el trabajo de incidencia política a nivel regional e internacional. Muchos de estos tratados reconocen derechos a los pueblos indígenas y a las mujeres, de tal manera que los países que los ratifican están en la obligación política de implementarlos.
El espacio del derecho internacional ha comenzado a comprender lentamente las necesidades específicas de las mujeres indígenas, lo que debe llevar al ECMIA a poder sugerir e impulsar enmiendas que incluyen estos derechos en los tratados como el de la CEDAW o Belém do Pará, que no contempla la relación cercana de las mujeres indígenas con el territorio y recursos naturales, ni la violencia que viven las mujeres y jóvenes cuando son despojados de estos.
- Declaración Universal de Derechos Humanos
- Convenio 107 de la OIT de 1957
- Convenio 169 de la OIT de 1989
- Declaración de la ONU sobre Derechos de los Pueblos Indígenas
- PIDESC: Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales
- Pacto Internacional de Derechos Políticos y Civiles
- CEDAW
- Convención Interamericana para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra la mujer – Belém do Pará.
- Convenio Internacional sobre las trabajadoras domésticas.
Asimismo, existen otros instrumentos internacionales lo cuales son urgentes que los Estados los acojan como parte del establecimiento de políticas de derechos de los pueblos indígenas, específicamente de mujeres indígenas; como lo es la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas. De la misma manea, es necesario acelerar el proceso de aprobar y establecer la Declaración Americana de los Derechos de Pueblos Indígenas.
Por otro lado, existen limitaciones para la participación de mujeres y jóvenes indígenas en instancias internacionales con poder de decisión, debido a que no hay financiamiento disponible, voluntad política de organizadores y especialización en los temas a tratar, las limitaciones como el acceso a recursos y a la información sobre los mecanismos de participación son aspectos que se vienen dando siempre. En la mayoría de las organizaciones nuestros trabajo a diario es por la lucha de los recursos naturales y del territorio, contra las formas de violencia; dejando de lado la necesidad de incidir internacionalmente debido a las limitaciones antes mencionadas y oportunidades.
3.2. Actores y alianzas estratégicas identificadas.
3.2.1. Actores que deciden e influyen en los procesos del continente y las regiones:
- • Gobiernos.
- • Pueblos indígenas y sus organizaciones
- • Mujeres y jóvenes indígenas y sus organizaciones
- • Organismos Internacionales
- • Otros movimientos sociales:
- - Movimiento sin tierra
- - Movimiento feminista
- - Mujeres afrodescendientes
- - Foro Social Mundial
- • Partidos políticos
- • Empresas nacionales
- • Empresas transnacionales
- • Académicas y académicos
3.2.2. Alianzas estratégicas y vínculos a construir y fortalecer
- • Organismos y organizaciones de defensa de Derechos Humanos
- • Organizaciones de Pueblos y Mujeres Indígenas.
- • Redes indígenas regionales y globales.
- • Organizaciones que abordan temas de la agenda indígena desde la perspectiva de sus derechos, de género e intereses.
- • Con otros movimientos sociales:
- - Movimiento sin tierra.
- - Movimiento feminista.
- - Mujeres afrodescendientes.
- - Foro Social Mundial.
- • Organismos Internacionales
- • Académicas y académicos
- • Medios de comunicación y líderes de opinión pública.
3.3. Desafíos del ECMIA.
3.3.1. Desafíos internos
- • Establecer los procesos y procedimientos para consensuar pronunciamientos y declaraciones políticas por violación a derechos humanos de mujeres, niñez y juventud indígenas por los Estados.
- • Desarrollar capacidades para generar y captar recursos económicos permanentes que permitan el funcionamiento del ECMIA. Asegurar el financiamiento para el funcionamiento del Plan Estratégico, los planes trienales, programas y proyectos del ECMIA.
- • Contar con liderazgos especializados en incidencia subregional e internacional en los temas generales y estratégicos.
- • Contar con abogadas indígenas especialistas como defensoras de derechos humanos de las mujeres y jóvenes indígenas.
- • Consolidar un sistema de comunicación y difusión para el ECMIA. Mejorar los canales de comunicación, desarrollando habilidades en el manejo efectivo de la tecnología. Establecer observatorios sobre casos de violación de derechos de mujeres y jóvenes indígenas, en situación de riesgo y vulneración de derechos; como parte del proceso de denuncia.
- • Ampliar la Red de referentes de las organizaciones integrantes del ECMIA.
- • Aprovechar el conocimiento y las capacidades de las mujeres indígenas integrantes del ECMIA.
- • Identificar a los socios estratégicos clave a nivel continental y regional.
3.3.2. Desafíos externos
- • Construir vínculos sólidos y alianzas estratégicas con actores clave a nivel continental y regional.
- • Establecer, fortalecer y afianzar los vínculos y alianzas estratégicas con organismos internacionales y organismos de cooperación para ampliar la capacidad de acción y contribuciones al ECMIA.
- • Participar con identidad y voz propia en espacios como:
- - El Sistema de las Naciones Unidas.
- - Mecanismo de Expertos sobre Derechos Humanos.
- - El Sistema de Estados Americanos.
- - CEDAW. - Los procesos de la Agenda Post 2015.
- - El Plan de Acción de la Conferencia sobre Población y Desarrollo - CAIRO
- - La Plataforma de Acción de Beijing.
- - Las Conferencias Mundiales de Partes – COPs.
- - El Convenio sobre la Diversidad Biológica.
- - La Organización Mundial de Propiedad Intelectual.
- - Corte Interamericana de los Derechos Humanos.
- - Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial – CERD.
- • Promover una mayor atención a la situación y derechos de las mujeres indígenas en el marco jurídico internacional y exigir la ratificación y cumplimiento en la aplicación por parte de los gobiernos y estados del continente.
- • Realizar participación cohesionada e integrada con propuestas representativas del ECMIA.
Sección 4: Visión de Continente, Misión y Visión Organizacional
4.1. Nuestra Visión de Continente
Nuestra visión como mujeres indígenas es que el continente americano se distinga por su diversidad cultural, en un contexto de respeto de los derechos humanos, igualdad de género y no discriminación, las mujeres indígenas estemos visibilizadas y empoderadas en derechos políticos, económicos, sociales y culturales, disfrutando de una vida plena, con igualdad de oportunidades y derechos, sin violencia, sin pobreza y en armonía con la naturaleza de acuerdo a la cosmovisión de nuestros pueblos indígenas.
4.2. Nuestra Misión.
Articular a las organizaciones de mujeres indígenas y de organizaciones mixtas del continente, visibilizándolas e incidiendo en espacios y procesos de decisión para la defensa y conquista de sus derechos, guiadas por la cosmovisión de los pueblos indígenas en un continente pluricultural.
4.3. Nuestra Visión
El ECMIA es un referente a nivel mundial como la máxima organización representativa de mujeres indígenas del continente americano, con una organización fortalecida, y con mujeres líderes indígenas incidiendo en ámbitos de decisión a nivel continental en forma coordinada y articulada a través de sus enlaces regionales, posicionando la voz, los derechos, los aportes y las propuestas de las mujeres indígenas de todas la etnias, lenguas y generaciones, en los temas y áreas estratégicas de su interés y de interés de los pueblos indígenas.
Sección 5: Objetivo Estratégico y Estrategias Generales
5.1. Objetivo Estratégico al 2022
Mujeres indígenas de todas las culturas, pueblos y territorios indígenas han ampliado el reconocimiento y ejercicio de sus derechos políticos, económicos, sociales y culturales, a nivel individual y colectivo, en igualdad de condiciones con relación a mujeres no indígenas y al interior de sus comunidades y pueblos indígenas.
5.2. Estrategias Generales
Objetivo Estratégico al 2022
Mujeres indígenas de todas las culturas, pueblos y territorios indígenas han ampliado el reconocimiento y ejercicio de sus derechos políticos, económicos, sociales y culturales, a nivel individual y colectivo, en igualdad de condiciones con relación a mujeres no indígenas y al interior de sus comunidades y pueblos indígenas.
Estrategias Generales
Estrategia 1
1. Fortalecer las organizaciones de mujeres indígenas del continente y desarrollar capacidades de liderazgo de mujeres indígenas para incidir en políticas públicas, marcos jurídicos y programas que beneficien a las mujeres indígenas en el goce de sus derechos, como parte de los pueblos indígenas.
Líneas de acción de la Estrategia 1:
- 1.1. Desarrollo de capacidades de liderazgo de mujeres indígenas, jóvenes y adultas, en el manejo de los marcos jurídicos internacionales, regionales y nacionales, relativos a pueblos indígenas, a mujeres y a igualdad de género; y en la defensa de sus derechos.
- 1.2. Desarrollo de capacidades de mujeres indígenas, jóvenes y adultas, para el análisis, formulación y negociación de propuestas de política relativas a los asuntos de su interés.
- 1.3. Fortalecimiento de la capacidad de las organizaciones de mujeres indígenas para visibilizar y difundir la situación de las mujeres indígenas y canalizar sus voces, necesidades, intereses y aportes en espacios y organizaciones de pueblos indígenas y otros espacios estatales y de sociedad civil del continente.
Estrategia 2
1. Promover y apoyar la participación efectiva y plena de mujeres indígenas en ámbitos políticos y públicos de decisión al nivel local e internacional, en los asuntos que le competen, particularmente en lo referido a su acceso a la tierra, territorio y recursos productivos; acceso a justicia; salud integral; educación intercultural y respeto a su cultura e identidad.
Líneas de acción de la Estrategia 2:
- 1.1. Desarrollo de conocimientos y capacidades de argumentación y propuesta de mujeres indígenas, adultas y jóvenes, en los temas estratégicos: acceso a la tierra, territorio y recursos productivos; acceso a justicia; salud integral; educación intercultural y respeto a su cultura e identidad.
- 1.2. Apoyo a la participación activa y plena de mujeres indígenas, jóvenes y adultas, en organizaciones, espacios y entidades políticas y públicas en sus países y en la región.
- 1.3. Alianzas estratégicas con organizaciones de pueblos indígenas, organizaciones de mujeres no indígenas, organismos no gubernamentales de desarrollo (ONG), organismos internacionales y de cooperación internacional, para el fortalecimiento de la participación política y pública de mujeres indígenas y el posicionamiento de su agenda.
Estrategia 3
1. Fortalecer la capacidad de gestión y auto-sostenimiento de las organizaciones de mujeres indígenas, generando y desarrollando sus propias fuentes de ingresos y canalizando recursos de cooperación internacional y de otras fuentes para ejecutar proyectos dirigidos a mejorar la calidad de vida y bienestar de las mujeres indígenas, reforzando su identidad y cosmovisión.
Líneas de acción de la Estrategia 3:
3.2 Atención a problemáticas de mujeres indígenas, niñas, jóvenes y adultas, y apoyo a sus iniciativas y a sus organizaciones en los temas estratégicos de su interés.
Estrategia 4
1. Fortalecer al ECMIA y a sus enlaces regionales en sus capacidades de gestión, de articulación, de incidencia, de generación de propuestas políticas y de acción coordinada en espacios públicos mixtos y de pueblos indígenas, para la eficaz implementación de sus estrategias y el logro de su visión y misión.
Líneas de acción de la Estrategia 4:
- 1.1 Fortalecimiento de la estructura y funcionamiento del ECMIA, al nivel continental y regional, particularmente en lo relativo a sus instrumentos de gestión, sistemas de comunicación y articulación interna; y desarrollo de capacidades de gestión de las líderes y representantes del ECMIA.
- 1.2 Fortalecimiento de la actuación articulada y coordinada del ECMIA en espacios públicos del nivel continental e internacional, y desarrollo de capacidades de las líderes y representantes del ECMIA en la elaboración de propuestas y desarrollo de estrategias de incidencia política.
- 1.3 Fortalecimiento de vínculos institucionales del ECMIA con actores públicos y privados y desarrollo de alianzas estratégicas y asocios, en base a intereses y enfoques comunes en la defensa de los intereses y derechos de las mujeres y pueblos indígenas.
- 1.4 Desarrollo de una estrategia de recaudación de fondos y autosostenimiento del ECMIA.